El nuevo contrato se ha adjudicado por 13.842.637 euros y para los próximos 8 años sin posibilidad de prórroga, uno de los contratos más importantes del Ayuntamiento
Urbaser S.A. ha resultado ser la empresa adjudicataria del contrato de servicio de limpieza viaria y recogida de residuos del Ayuntamiento de Calatayud. El Pleno Municipal celebrado este lunes aprobó la adjudicación de este contrato para los próximos 8 años (sin posibilidad de prórroga) y por un total de 12.584.216 euros más IVA. El nuevo contrato, uno de los más importantes del Ayuntamiento bilbilitano, incorpora numerosas mejoras para optimizar el servicio y responder a las necesidades actuales de la ciudad. "Nuestro compromiso con la ciudadanía es lograr una ciudad más limpia que gestione de la mejor manera posible sus residuos y gracias a la renovación de este servicio vamos a avanzar en ese objetivo", explicó la concejal de Medio Ambiente, Ana Isabel García. La concejal explicó que las mejoras que presenta el nuevo contrato tendrán un impacto positivo en la localidad. En lo que respecta a la limpieza viaria se incrementan los recursos humanos, se renueva la totalidad del parque de vehículos mecánicos y los equipos de limpieza y se crea una base de operaciones distinta a la dedicada a la recogida de residuos, pero muy próximas, con el fin de optimizar la jornada efectiva de la plantilla.
El contrato de limpieza de vías públicas abarca el barrido, baldeo, recogida, transporte y gestión de residuos, eliminación de pintadas, distribución de materiales para evitar heladas, eliminación de hierbas, mantenimiento, limpieza y vaciado de papeleras, dispensadores caninos, etc.
En base al nuevo contrato se renovará la totalidad de los contenedores de la ciudad y se apuesta por instalar contenedores con un sistema de carga lateral, cuyo sistema de recogida permite reducir las isletas de contenerización, minimizando el impacto estético que producen en su entorno. En total se colocarán 546 de carga lateral y 183 de carga trasera, que irán ubicados en zonas de difícil accesibilidad. El nuevo contrato aumenta las frecuencias de lavado y desinfección de los contenedores e incorpora a más operarios (de seis a diez) dedicados a la recogida de residuos. Ello permite aumentar la frecuencia de los servicios tanto en la ciudad, los barrios pedáneos y las zonas industriales.
El contrato aprobado por el Ayuntamiento unifica el servicio de recogida de fracción resto, orgánica, envases ligeros, papel y cartón domiciliario, residuos voluminosos particulares, recogida de animales muertos y residuos extraordinarios. Y, en el caso de los residuos voluminosos, la recogida será diaria en vez de semanal, como se hacía hasta la fecha. Además, y como novedad, los contenedores incorporarán un interesante sistema de control cualitativo y cuantitativo, que hará posible la ejecución de auditorías para controlar la calidad global del contrato.
Una adjudicación sin consenso
La adjudicación de este contrato se aprobó el pasado lunes en el Pleno municipal sin el consenso de todos los grupos políticos. PP, Cs y VOX votaron a favor, pero PSOE y PAR se abstuvieron en la votación. La portavoz del Partido Aragonés, Ana Belén Ballano, recordó a los allí presentes que una de las UTE´s que se presentaron al concurso “ha interpuesto un recurso especial en materia de contratación que está todavía sin resolver”, por lo que “sería mejor no materializar de momento la adjudicación a Urbaser S.A. hasta que no se resuelva el recurso, por si luego de ahí pudiera derivarse algún tipo de reclamación económica al Ayuntamiento”, señaló Ballano.
El portavoz de Ciudadanos, José Hueso, indicó que en ese recurso no se ha planteado la suspensión del contrato, y que por tanto “eso no puede frenar al Ayuntamiento”.
Desde el PSOE el concejal Jesús Monge apuntó a que era muy probable que también presente recurso alguna otra empresa de las que se presentaron al concurso, y volvió a incidir en la “remunicipalización del servicio”. Para el alcalde bilbilitano remunicipalizar el servicio sería como “volver a la época de las cavernas”. Aranda concluyó que “el Tribunal de Contratos Públicos no ha respondido a nuestras llamadas y no incluye ninguna condición suspensiva” de la adjudicación. Si no hay más recursos en los próximos 15 días se podría firmar el nuevo contrato.
