El presidente del Gobierno de Aragón visitaba ayer las obras del embalse de Mularroya, reclamando “un debate sin dogmatismos entre todos los ecologistas”
El Presidente de Aragón, Javier Lambán, ha visitado hoy la presa de Mularroya, cuyas cobras de ejecución ya se encuentran al 70%, con un plazo de finalización previsto para finales de 2023.
El embalse de Mularroya es una obra de regulación hidráulica en el río Grío, que supone un claro beneficio para el desarrollo sostenible de la cuenca del Jalón, ya que mejora las garantías de suministro a los distintos usos, consolidando la superficie regable actual que se incrementará en 5.000 hectáreas.
El presidente ha visitado las obras acompañado por el consejero de Agricultura, Ganadería y Medioambiente, Joaquín Olona, y la presidenta de la CHE, Dolores Pascual, además del presidente de la DPZ, Juan Antonio Sánchez Quero y de la Junta de Regantes, que han acogido de buen grado la última sentencia del Tribunal Supremo, favorable a la continuación de las obras.
El presidente aragonés ha celebrado la sentencia con los usuarios, regantes y la empresa, que ha defendido los intereses de todos, así como a la administración hidráulica (CHE) porque avala las obras y espera que se despeje definitivamente el horizonte hasta su culminación “porque es una de las obras más importantes del Pacto del Agua y una de las contempladas en recientemente aprobado Plan Hidrológico de Cuenca, con el que nosotros estamos fundamentalmente satisfechos”.
Lambán se ha mostrado orgulloso de liderar en Aragón la transformación de secano en regadíos en toda España, cosa q no se hace en la práctica totalidad de las Comunidades autónomas. Sin embargo, en Aragón ya hay en marcha 28.000 hectáreas que llegarán a 39.000 cuando entren en funcionamiento todas las previstas en el Plan Hidrológico de cuenca. También se ha mostrado sastisfecho con el impulso dado a la modernización de regadíos, no solo apoyado con fondos de la PAC, sino también de fondos europeos MRR que contempla una cantidad de 82 millones de euros que son gestionados por el ministerio pero bajo criterios del Gobierno de Aragón.
El presidente aragonés ha afirmado que esta es una política prioritaria para su ejecutivo porque hay pocas maneras de actuar en el territorio que contribuyan tanto a fijar la población y a la revitalizacion del medio rural como es la agroalimentación. Pero para que esta sea rentable debe haber regadíos y para que haya regadíos es fundamental las regulaciones de los ríos.
Javier Lambán ha apelado al “diálogo sincero, sin dogmatismos”, entre partidarios de embalses y los que no lo son “porque ecologistas somos todos”. El presidente de Aragón ha asegurado que los agricultores son los primeros que velan por la sostenibilidad del sistema y ha explicado que la diferencia entre unos ecologistas y otros es que “nosotros, además somos también defensores de la sostenibilidad económica y de que haya vida en el territorio”.