Una denuncia de una estafa de un ciudadano de Calatayud a la hora de comprar un animal de compañía lleva a la Policía Nacional a destapar una estafa nacional por internet

Seis investigados fueron puestos a disposición judicial

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Se han detenido a 6 investigados con el centro de las operaciones en Bilbao



Una denuncia presentada por un ciudadano de Calatayud, tras ser estafado en la compra de un cachorro de perro por internet, ha llevado a la Policía Nacional a descubrir una trama de estafas que afectaba a más de 500 personas en todo el país, con un monto total defraudado superior a los 150.000 euros.

Investigación y detenciones
El afectado pagó 500 euros por un cachorro que nunca recibió ni tuvo noticias del vendedor. Las investigaciones realizadas por la Policía Nacional permitieron descubrir un entramado criminal con sede en Bilbao, que operaba mediante la publicación de falsos anuncios de venta de animales de compañía.
En la primera fase de la operación, denominada Faraday-Txakoli, los agentes analizaron más de 20 líneas móviles y 70 cuentas bancarias utilizadas para recibir los pagos fraudulentos. Se determinó que detrás de estas estafas se encontraba una organización estructurada, con miembros encargados de contratar líneas telefónicas, gestionar la logística y contactar con las víctimas. La pareja cabecilla de la trama, de 30 y 29 años, se encargaba de la captación de víctimas.
En una intervención coordinada, se detuvo a seis de los nueve investigados en Bilbao, incluyendo a los principales líderes de la organización. Además, se bloquearon 14 cuentas bancarias y un depósito a plazo fijo. En el domicilio de los investigados, los agentes incautaron cinco terminales móviles y tarjetas SIM utilizadas para cometer los fraudes.

Modus operandi y perfil de las víctimas
La estafa consistía en la publicación de anuncios en plataformas de compraventa, ofreciendo cachorros de perros, gatos o loros a precios atractivos. Tras contactar con los interesados, enviaban imágenes de los supuestos animales y ofrecían la posibilidad de elegir su género o nombre. Una vez realizado el pago inicial, exigían más dinero con excusas como vacunas, impuestos o gastos de transporte. En muchos casos, las víctimas eran amenazadas con denuncias por abandono si no abonaban nuevas cantidades.
Con el avance de la investigación, se detectó que la organización amplió su actividad a la supuesta venta de teléfonos móviles de última generación, utilizando el mismo método fraudulento.
Las víctimas de esta red eran en su mayoría mujeres de mediana edad, muchas de ellas en situaciones de vulnerabilidad tras la pérdida de un ser querido.

Intervención de la Policía Nacional
La operación ha sido llevada a cabo por la Comisaría de la Policía Nacional de Calatayud, con apoyo de la Comisaría General de Policía Judicial, Policía Nacional de Zaragoza y la Comisaría de Bilbao y seis de los investigados fueron puestos a disposición judicial en el Juzgado de Calatayud.

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