“Caldo reconstituyente, traca, bombos, bombos, bombos...”
Como primera mujer peñista del año, en 1983, definir en media página, uno de los capítulos más importantes de mi ya dilatada vida, no es sencillo, aún menos cuando los recuerdos de todas mis vivencias en San Roque harían, gota a gota, un río tan importante como nuestro Jalón.
Aunque en todos mis San Roques me he sentido absolutamente feliz, cuando fui elegida "Peñista del Año" me sentí, además, algo que a todo el mundo le gusta sentirse entre sus paisanos: "QUERIDA"
Ahí van unas cuantas gotas de lo que para mí supone San Roque:
Novena, Ermita, Euqor, vino de honor, reencuentro, exaltación de la amistad, abrazos, bombos, peñistas, chupinazo, polvos de talco, risas, charanga, vermuts, sol en la plaza de toros, la era del chocolate, guerra de merengues, desbarajuste, sentarse en el suelo y comer en la calle, dormir muerto y morir bailando, dolor en todo el cuerpo, resucitar cada día, risas con Espolios y Gallegos, besos, más abrazos, ronquera, dejarse el alma, chistes, hermanos, vaquilleros, sardinas en el Ibiza, gambas con gabardina en La Ronda, madejas en El Ruedo, cenas con mi amigo Machote.
Caldo reconstituyente, traca, bombos, bombos, bombos….
Fdo. M.ª Carmen Monge Lavilla
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