“Elevaremos nuestras oraciones por todos los que nos han ido dejando”
Hermanos y hermanas cofrades,
Todos albergábamos Esperanza; cuando la pasada Cuaresma 2020 el covid-19 nos arrebató de súbito nuestra Semana Santa, nadie podía llegar a creer que, pasado todo un año, la pandemia que este había causado iba a obligarnos a dejar a nuestros Titulares sin poder montar en sus Pasos y sin realizar nuestras procesiones y estaciones de Penitencia por las calles de nuestra querida Calatayud. Este año ya no será igual, vamos a poder visitar a nuestros Amantísimos Titulares en los altares que se van a preparar en nuestra Parroquia, atendiendo y respetando con escrupulosa
solicitud las medidas sanitarias de aforo y de higiene, celebraremos los cultos y Vía Crucis con especial recogimiento y devoción, elevando nuestras oraciones por todos los que nos han ido dejando en estos tiempos tan difíciles y duros; también los elevaremos por todos aquellos que cada día han estado luchando en esta dura pandemia y por supuesto por todos aquellos a los que todavía les queda por luchar, no será fácil, pero pasará. Viendo que los procesos de vacunación ya pueden poner una luz al final de este oscuro túnel tenemos que volver a creer en nuestros sueños y mientras se va terminando este duro camino, con renovada fuerza prepararnos para poder celebrar con especial emoción una futura Semana Santa en 2022 llenando las calles de religiosidad, con Incienso y Devoción, dando testimonio de nuestra fe
tocando nuestros tambores y matracas, portando luces y cargando Pasos, inundando cada rincón con los sonidos, olores, recuerdos y sentimientos con nuestra forma de vivir y sentir la Pasión.
Todos albergamos Esperanza, a ELLA nos entregamos para que con paciencia nos ayude a sobrellevar y entender esta vicisitud, convencidos de que de mano de la Santísima Madre alcancemos a Cristo Resucitado.
Javier Villa Gómez
Hermano Mayor
