El consejero de Agricultura se reúne con productores de cereza para impulsar las acciones en busca de potenciar esta fruta
El consejero de Agricultura, Ganadería y Alimentación, Javier Rincón, visita este viernes Calatayud para reunirse con representantes de los productores de cereza de la zona y su entorno. El objetivo principal del encuentro es evaluar la posibilidad de crear un sello de calidad para este producto agrícola, que representa un cultivo clave en las comarcas de Calatayud y del Aranda.
El consejero estará acompañado por el alcalde de Calatayud, José Manuel Aranda, quien explicó que este encuentro es una continuación de las conversaciones mantenidas con los productores en septiembre. Durante la jornada, además de la reunión de trabajo, está prevista una visita a una finca en La Vilueña que está experimentando un notable crecimiento y a un grupo de ciudadanos en Miedes de Aragón.
Impulsar una figura de calidad diferenciada
La reunión busca animar al sector a promover una figura de calidad diferenciada, como una Denominación de Origen (DO) o una Indicación Geográfica Protegida (IGP). Según Javier Rincón, “el sector tiene que liderar esta iniciativa, y desde el Gobierno les ayudaremos en todo el proceso. Queremos evaluar lo trabajado hasta ahora, recuperar los avances existentes y dar los pasos necesarios para dirigirnos a la Unión Europea y completar los trámites”.
Aragón es el principal productor de cereza en España, con alrededor del 40% de la producción nacional, unas 10.000 hectáreas y 70.000 toneladas anuales, junto con Extremadura, concentran entre el 75% y 80% de la producción del país. En este contexto, las zonas de Calatayud y el Aranda, por su altitud y características climáticas particulares, ofrecen condiciones óptimas para una producción de alta calidad.
Un modelo inspirado en el éxito del melocotón de Calanda
En Aragón, el único producto frutícola con Denominación de Origen es el melocotón de Calanda, un modelo que podría inspirar a los productores de cereza de la región. La creación de una figura de calidad diferenciada no solo daría valor añadido al producto, sino que también potenciaría su competitividad en mercados nacionales e internacionales.
Próximos pasos
El encuentro servirá para sondear la disposición del sector a avanzar en esta iniciativa y analizar los beneficios que podría traer. “Es una acción voluntaria de los agricultores, pero puede ser muy beneficiosa para ellos y para la región”, subrayó el consejero.
Agricultores
Leonardo Baquedano, consejero de la Comarca de Calatayud y también productor de cereza explicaba la importancia de contar con un sello de calidad. “Tenemos una cereza de gran calidad por la altitud. En principio tendríamos que crear una IGP, llevamos cuatro años trabajando en el tema, y con un sello de calidad es mucho más fácil vender en los mercados”.
Por su parte, Alberto Pérez, presidente de la Asociación para la Promoción de la cereza también hacía hincapié en el apoyo de las instituciones y en los estudios realizados de la cereza de la zona. “Esperamos una ayuda firme y sólida de las instituciones para sacar esto adelante. A través de estudios realizados hemos comprobado la diferencia de calidad entre las cerezas que se producen aquí y las del resto de España. La altitud hace que haya diferencia térmica entre el día y la noche y que nuestro producto tenga mucha más calidad que el resto de cerezas que se producen en España”.