Los agricultores no entienden la elección de esta comarca para realizar las pruebas ni están de acuerdo en caso de positivo el de llevar a toda la cuadrilla a cuarentena
La ONG Open Arms, en colaboración con el Gobierno de Aragón tiene previsto realizar en la comarca de Calatayud una prueba piloto que consistirá en realizar PCRs a los trabajadores contratados para la recogida de la fruta. Se trata de un programa piloto que en teoría comenzará a primeros de septiembre y que en principio podría ser voluntario.
Ayer tenía lugar una reunión convocada por el Ayuntamiento de Calatayud en el recinto de Claretianos con agricultores de la comarca, una entrevista que reunía a prácticamente 60 agricultores. Algunos de ellos consultados por Calatayudnoticias, afirmaban que “nos parece bien realizar test masivos pero no entendemos ni que se haya elegido Calatayud para realizarlos, cuando por ejemplo la temporada de pera está a siete días de terminar, ni alguna de las medidas en caso de que algún trabajador salga positivo. Si un trabajador sale positivo la intención es la de confinar a toda la cuadrilla lo cual significa que no podamos recoger la fruta. Lo lógico sería confinar al positivo y a los trabajadores de contacto directo. Nadie nos oponemos pero molestan las formas, molesta que sea Calatayud cuando el número de temporeros de fuera que se contratan es mínimo y que si sale un positivo tengamos que abandonar la cosecha cuando esto no ha tenido lugar en ningún punto de España. Si nos ponen en cuarentena a la totalidad de la cuadrilla supone en la mayoría de explotaciones, (que son casi familiares), cerrar la explotación y esto no es una solución ni para frenar la Covid ni para beneficiar a nadie, y tirar por tierra el trabajo de todo un año".
Se da, además, la circunstancia en nuestra zona que para la recogida de pera y manzana los agricultores contratan a más del 80% de los temporeros de la misma zona, es decir casi todos los trabajadores cuentan con vivienda propia en el entorno siendo de la misma, por lo que hay un pequeño porcentaje de trabajadores que residen en otros lugares, mientras que en otras zonas se emplea muchísima más mano de obra de fuera de la zona y, además, han registrado muchos más positivos que en nuestra comarca.
Por parte del Ayuntamiento de Calatayud, el concejal delegado de agricultura, Jorge Lázaro, se manifestaba en el mismo sentido que los agricultores. “Desde el pasado jueves estamos en contacto con el Gobierno de Aragón para intentar que no se ponga en riesgo la recogida de la fruta. Confinar a todo una cuadrilla es confinar a todos los trabajadores contratados y por lo tanto no recoger la fruta. En una finca pequeña parar a una cuadrilla es poner en riesgo la viabilidad de la cosecha. Vamos a seguir trabajando para intentar reconducir esta situación”.
Por lo tanto parece que no se entiende muy bien que mientras en otras zonas se están recogiendo las cosechas sin estas “obligaciones”, se elija a Calatayud para realizar una prueba piloto cuando ni se emplean un alto número de personas residentes en otras zonas, ni se tenga en cuenta por ejemplo que la temporada de recogida de algunos frutos como la pera está a punto de terminar. Por otro lado tampoco se está de acuerdo en la obligatoriedad de que en caso de un positivo tener que poner en cuarentena a toda la cuadrilla puesto que esto significaría no recoger la fruta y por lo tanto perder toda la cosecha.
Por delante queda terminar con la campaña de la pera, sobre todo la manzana que suele terminar en nuestra comarca en octubre y también habría que estar atentos a la recogida de la uva.
Colaboración del Ayuntamiento
El Ayuntamiento también podría poner a disposición de los agricultores alojamiento para facilitar la cuarentena a afectados leves o asintomáticos, a pesar de que la mayoría de agricultores de la zona contratan a trabajadores del entorno y por lo tanto con residencia en la comarca.