Muy buenos días!!!! hace un día maravilloso y me apetece llevaos de ruta al que para mi es EL PUEBLO MÁS BONITO DE..... os doy una pista , está en la #ComunidadCalatayud y tuve la inmensa suerte de nacer allí... os llevo a mi pueblo #FuentesdeJiloca.
Os voy a contar cuatro cosas y así os pongo la miel en los labios para que vayáis a conocerlo...
Tras la conquista de Calatayud y su área de influencia, Alfonso I el Batallador reorganizó el territorio bajo un fuero concedido en 1131, delimitando un territorio mucho más extenso que el que después englobó la Comunidad de Aldeas de Calatayud constituida entre 1251 - 1254 . En un Cabreo Municipal de Calatayud de 1612, donde se relacionan los documentos que se custodiaban en el desaparecido Archivo de la Comunidad de Aldeas de Calatayud aparece transcrita la bula del Papa Lucio III emitida el 26 de febrero de 1181, una de las primeras referencias escritas sobre Fuentes de Jiloca o Fuentes de Xiloca.
Una vez constituida la Comunidad de Aldeas de Calatayud bajo el reinado de Jaime I El Conquistador Fuentes de Jiloca pasó a formar parte de la Sesma del Jiloca, junto con Atea, Maluenda, Mochales, Montón, Olvés y dos pequeñas poblaciones o pardinas que se ubicaban en su término municipal: Buytrin o Boitryn y Nobella o Novella desaparecidas a finales del siglo XIV y unidas a finales del siglo XV a Fuentes de Jiloca.
La Guerra de los Pedros (135-1369) alteró la pacífica existencia de los habitantes de Fuentes de Jiloca y sucedió un hecho en el que varios autores ven el origen de la presencia del castillo en el escudo de armas de la localidad. Tal y como relata Miguel Martínez del Villar en 1598 el monarca castellano entró en Calatayud el 9 de agosto de 1362 y continuó el asedio a los pueblos de la ribera del Jiloca. Asedio del que no se libró el Fuentes. Pero en este castillo resistió los envites de los castellanos por lo que Pedro I decidió enviar al lugar a vecinos de otros pueblos para que, por las buenas, entregasen la plaza.
Los de Fuentes se negaron y según Martínez Villar, unos soldados castellanos se disfrazaron y acudieron al castillo de Fuetes aprovechando que solo estaban dentro las mujeres pues los hombre se hallaban en la iglesia. Cuando estuvieron dentro colocaron las banderas de Castilla en las torres, las mujeres comenzaron a gritar y a defender la fortaleza. Los hombres, al oír el barullo acudieron al castillo y despeñaron a los intrusos “ganándoles las banderas”. Este episodio de la guerra de los dos Pedros (1356-1369) que habla de la resistencia que los vecinos de la localidad, ocurrió, según recoge Alfredo Muñoz Gutiérrez, el 18 de octubre de 1362 festividad de San Lucas Evangelista.