A tenor de la encuesta en la línea de salida el electorado refrenda lo realizado en los últimos 12 años por el Partido Popular
Heraldo de Aragón publicaba en el día de hoy una encuesta sobre intención de voto en las principales ciudades aragonesas de cara a los próximos comicios municipales. Una encuesta en la que hay un claro favorito a tenor de la misma, el Partido Popular, que podrían alcanzar incluso 11 de los 17 concejales, por lo tanto de una forma muy holgada la mayoría absoluta.
Según esta misma encuesta, Partido Socialista obtendría entre 5 y 6 concejales, mientras que VOX y PAR son los únicos partidos que, siempre según esta encuesta, podrían alcanzar representación, ambos entre 0 y 1.
La encuesta no da posibilidad de contar con representación ni a Izquierda Unida, ni a Chunta Aragonesista ni tampoco a la coalición Ciudadanos-Tu Aragón.
Entendiendo que las encuestas, son eso, encuestas. En el arranque de la carrera electoral, un claro favorito, el Partido Popular con una diferencia sideral respecto al resto de partidos que se presentan.
La tendencia política de los bilbilitanos casi siempre ha estado ligada al centro derecha. Eso es algo evidente a tenor del repaso de todos los comicios municipales desde la Democracia, en los que excepto en dos legislaturas y media, siempre han mandado partidos de centro-derecha.
A tenor de esta encuesta también es algo evidente que la ciudanía, de confirmarse esta intención de voto, refrenda el trabajo realizado por el Partido Popular en el Ayuntamiento de Calatayud. Y si todo el mundo está contento, es evidente que, ¿para qué cambiar?
Comparándolo con una liga de baloncesto, nos encontramos con un equipo que juega toda la competición en casa y que es el claro favorito. El resto de equipos juegan fuera y lo hacen con pocas opciones. No les faltará ilusión por intentar conseguir un resultado sorprendente. No les faltarán ganas de remar en contra corriente y tampoco les faltarán ganas de presentar algo diferente a los últimos años.
Ahora será el momento de comenzar a disputar los partidos. Uno, intentará hacer valer su condición de favorito; los demás, a intentar dar la sorpresa o incluso a mejorar sus pocas opciones. Al final, el voto lo tenemos todos, que será lo que cuente.
En cuanto al Gobierno de Aragón la situación está mucho más abierta y podría volver a darse el caso de un gobierno de coalición parecido al de esta última legislatura, lo mismo que en Diputación Provincial de Zaragoza. En ambas instituciones parece complicado un gobierno con mayoría absoluta.
FDO. P.M.