El foco de atención en Aragón pasa a ser nuestra comarca
Antes de nada exponer que este artículo entra en la sección de opinión puesto que no deja de ser una mera opinión de la redacción de www.calatayudnoticias.com.
En primer lugar nos gustaría ofrecer todo el ánimo posible a los afectados por la Covid de la Residencia Municipal San Iñigo, a ellos, a los ancianos y a todos sus familiares.
En segundo lugar mostrar también todo el apoyo posible y nuestra admiración a todos y cada uno de los trabajadores de la residencia. Ellos están sufriendo en carnes propias toda la tensión acumulada por preservar la salud de los residentes y de sus familiares.
Y en tercer lugar mostrar también todo el apoyo posible a los responsables de esta residencia, en este caso al Ayuntamiento de Calatayud, que al fin y al cabo somos todos y cada uno de los ciudadanos de esta población.
Son momentos complicados y ojalá que la situación se salve tal y como está ahora, con muchos casos pero con muchos de ellos asintomáticos. Esta sería para nosotros y para todos los que nos leen diariamente la mejor noticia en estos momentos.
A lo largo de toda esta pandemia les hemos ido contando lo que buenamente hemos podido y en estos momentos lo que nos apetece es poner en valor a los residentes, por su tremenda capacidad de adaptación, en esta y en casi todas las residencias, por todo lo que están sufriendo tras un duro confinamiento que parece no tener fin, sin la opción de poder abrazar a sus familiares o recibir el cariño de los mismos. Ellos están siendo posiblemente el mejor ejemplo para todos.
En el mismo sentido poner en valor el trabajo de todos los profesionales de la residencia, de ésta y de la mayoría. Una tensión diaria casi insoportable por preservar el estado de salud de los mayores y con el lógico sufrimiento de preservar su salud y la de sus seres queridos. Chapó para todos ellos, posiblemente también cuando más lo necesitan.
Nombrar también a todos los componentes del Ayuntamiento de Calatayud. Quizás algunos puedan discutir sobre más o menos ayudas a distintos sectores de la ciudad o distintos apartados que terminan siendo banales cuando está en juego la salud de los bilbilitanos. Un Ayuntamiento que ha tomado medidas en la residencia desde antes del inicio de la pandemia siempre con el objetivo de preservar también la salud de residentes y trabajadores. Que en ocasiones han tenido que tomar medidas duras de aislamiento y que gracias a ellas y al trabajo realizado en la misma durante muchos meses se ha conseguido preservar la salud del colectivo.
Y es que por muy bien que se intenten hacer o se hagan las cosas el peligro es evidente y ninguno estamos exentos de sufrirlo.
En su momento se puso en valor el trabajo y la profesionalidad de los trabajadores del hospital de Calatayud, su valentía, su arrojo en muchas ocasiones y su trabajo; ahora lo que toca es estar al lado de residentes y profesionales en este caso de la residencia afectada. Lo pensamos y así lo escribimos.
