CALATAYUD.- La Rúa de Dato se queda sin semáforo al abrirse el paso para vehículos de la Plaza de San Andrés

Imagen de la recreación de la plaza e imagen de la misma

Infraestructuras
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División de opiniones sobre el cambio de la plaza de una plaza a la que le faltan todavía elementos de protección y decoración. La obra contaba con un presupuesto inicial de algo más de 325.000 euros, con 150.998 euros financiados por Diputación de Zaragoza.

Ibdes


Durante el fin de semana pasado se abría al tráfico de vehículos la plaza de San Andrés, por lo que se procedió desde el Ayuntamiento a retirar los semáforos que regulaban el tráfico en la calle de Rúa de Dato, a la vez que han vuelto a recuperar su sentido habitual, (se había invertido), las calles de Vicente de la Fuente, Amparados y Hospital.
Las obras están prácticamente finalizadas aunque queda pendiente la instalación de mobiliario y algunos elementos de protección y decoración. También se está actuando en la adecuación del solar de aparcamiento, el soterrado del cableado y el embellecimiento de las fachadas contiguas.

Renovar infraestructuras y puesta en valor de la iglesia
El proyecto de renovación según contaba en su día el consistorio se realizaba con la finalidad de mejorar la plaza, renovar las infraestructuras y poner en valor la iglesia y su torre. Un proyecto redactado por el arquitecto Sergio Sebastián y que suponía una inversión de 325.899 euros, de los cuales Diputación de Zaragoza aportaba 150.998 euros.
El proyecto de la restauración es del arquitecto bilbilitano Sergio Sebastián ha estudiado la disposición y el sistema de rejillas y canales para que la pendiente facilite la correcta evacuación y recogida de aguas, en su conexión con la red de alcantarillado. Se sustituyen todas las redes de abastecimiento y saneamiento para evitar fugas y roturas. Asimismo, se soterrará el cableado aéreo.
La intervención ocupa una superficie de 1348 metros cuadrados y se incluye la mejora de aceras y la conexión con la superficie de aparcamiento en un solar en desuso, que se encuentra frente a la iglesia.
El elemento más característico de la renovación en la que trabaja el Consistorio es la creación de una gran estrella mudéjar en el pavimento que se iluminará con rayos de luz artificial. Junto a la estrella, una serie de piezas de cerámica, cuya geometría y materiales darán un protagonismo especial a la torre en el centro de la plaza.
Otro edificio en torno al cual se traza la plaza es el Teatro Capitol. El rediseño genera una terraza en la entrada del edificio que hará accesible la entrada por la puerta principal (en la actualidad las escaleras impiden el acceso a personas con movilidad reducida, que deben utilizar una entrada diferente).  Este planteamiento también dará más protagonismo a la fachada del edificio.
"Este proyecto va a traer un cambio estético a la plaza que va a invitarnos a contemplar el arte mudéjar que atesora. Propone un diseño novedoso totalmente integrado con su entorno", explicaba en su día el concejal de Urbanismo y Patrimonio, José Manuel Gimeno.
Dejando a un lado el plano estético, la renovación integral de la plaza pondrá fin a la degradación del pavimento que actualmente presenta. Las irregularidades, las grietas, los hundimientos y las diferencias de nivel suponen un riesgo para los ciudadanos, que transitan por un hormigón que ha sufrido numerosas reparaciones. En ese sentido, la solución propuesta prioriza la construcción de un plano único que tiene en cuenta la pendiente pronunciada que presenta la plaza, amplía el espacio público y ofrece un mayor protagonismo al peatón.
Como en cualquier obra las opiniones sobre el resultado de la misma son encontradas, puesto que muchas personas piensan que “se ha dejado una excesiva pendiente”, “los bancos están colocados de una forma peligrosa para los vehículos y como últimamente ocurre en las calles y plazas de la ciudad hay un número excesivo de bolardos, o la falta de escalones en algunas zonas que se han quedado muy altas".
También otras opiniones se preguntan si la evacuación de aguas no influirá en la cimentación de la torre, o si no hubiera sido más acertado darle una homogeneidad a la zona.

Por otro lado también otras opiniones son favorables, "salvando la excesiva pendiente la plaza está más integrada al entorno de la Iglesia de San Andrés".

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